Donde reside la Magia
Últimamente estoy en uno de mis momentos de "hacia abajo". Ya se sabe, con ésto de los estados de
ánmio, un día vas p'arriba, otro p'abajo, y la mitad de las veces ni siquiera hay una razón clara para
ir hacia un lado o el otro.
Sin embargo, ayer me encontré, entre otras muchas cosas -algunas tan desagradables como Leonardo
Dantés-, con que me ahogo en mi casa cuando me quedo todo el día en plan vegetal. Así que decidí que
lo mejor que podía hacer era salir a dar una vuelta.
Zeta me llevó a un sitio estupendo, en casi todo, donde te pillas botellines de
cerveza a un euro, y cuya única pega era que de pronto apareció el Dantés por detrás, y si al menos
hubiéramos tenido la cámara de fotos, habría salido una estupenda del "Me mola memola, cada día más"
Pues con eso y con todo, cuando volvía a mi casa me dí cuenta de que estaba cayendo en uno de mis
"plofs", y de que en realidad no lo notaba hasta que volvía. Porque, por alguna razón, el resto del
tiempo estaba en mi mundillo de talismanes, bálsamos y vampirismo energético.
Después de todo, va a ser que la magia sigue existiendo a pesar de todo, aunque a veces pueda parecer
que se ha extinguido, como los Dragones... Por encima de cualquier "pero", más allá del poderoso
caballero Don Dinero.