Llevamos unos días de fin de año, otra vez. Este es el lunar (más
conocido como simplemente Chino) y las celebraciones aquí son tan
exageradas como cualquier otra cosa que pueda verse en esta ciudad.
En el país de la pólvora los petardos son la máxima más típica. Se
compran en ristras choriceras de 1000 o 2000 petardos entrelazados, al
desdeñable precio de 2 y 3 euros respectivamente cada ristra, y tienen
un aspecto similar a esto:
Como estos 2000 petardos les parecen poco, hacen mosaicos de ristras en
la calle, en mitad de la calzada, organizando cosas de este palo:
Y cuando les da por encender la mecha, la que se monta es tremenda. En
el vídeo no se aprecia de verdad, pero estando allí las mascletás
valencianas parecen de coña, y durante 2 días seguidos esta escena se
repite por cualquier esquina de la ciudad, una vez detrás de otra:
Además de los petardeos ensordecedores, en las mismas calles ponen
tambores de fuegos artificiales, que por lo general suben sólo hasta la
mitad de los edificios que los rodean, haciendo un espectáculo curioso
de ver. Otro video del asunto:
Durante estos dos días, la ciudad es lo más parecido a Sarajevo que
conozco :)